Misión y visión del trader

Hace unos días un amigo me contaba cómo su esposa definió de la manera más simple lo que es la misión y visión de un trader dedicado a generar un flujo de ingresos para vivir de la actividad. Me he permitido tomar su idea para escribir este artículo, ya que encuentro que aunque es acertada la manera como se definen, también subyacen algunos peligros que es preciso evitar. Las definiciones de nuestra amiga (por eso en comillas) son:

• Misión: “ganar pips”
• Visión: “que sean muchos”

Respecto a la misión, no hay discusión alguna, eso es lo que un trader debe hacer… ganar pips. Así mantenemos alertas de nuestras metas y nuestro enfoque en el trabajo. Los trader que se imponen metas sobre ingresos monetarios se enfrentan al peligro de perder las proporciones. Una persona con una cuenta de digamos US$5000 que se plantee ganar US$1000 diarios se está poniendo mucha presión encima, ¡espera ganar el 20% al día! Para eso está el apalancamiento, diría esta persona, finalmente siente que domina su técnica, ¿por qué temer? ¿Acaso no sabe pues? Lo que no se ha planteado es que el uso exagerado de apalancamiento es bueno para las ganancias y catastrófico para las pérdidas, un elemento con el que siempre contamos. Dónde deja el manejo de riesgos? Los mejores trader del mundo no se han forjado con ganancias diarias de 20% sobre el capital, sino sobre ganancias consistentes de pips, con riesgos controlados, lo cual lleva a porcentajes de rentabilidad más ajustados a la realidad. Por poner un ejemplo para intraday, una persona que genere un total de 100 pips semanales con consistencia, tiene una meta muy lograble. Si a esto le suma un adecuado proceso de avance en lotes, en cerca de 6 meses tendrá un nivel de flujo de ingresos que supera sus expectativas si hubiese arrancado con metas de mil o dos mil pips por semana, ya que trabaja sin presión sobre algo lograble. Misión entonces: Ganar pips de manera consistente, con riesgos controlados.

Ahora hablaré de la visión. Nuestra amiga la define como “muchos pips”. Nada más peligroso que el trader que trabaja sobre el gran potencial del mercado para generar ganancias, como si todas fueran para él. Es como el empresario que proyecta sus ganancias sobre el total de la población. No imagino un empresario de hamburguesas que proyecte la venta de 6 mil millones de hamburguesas por día, porque el potencial de seres humanos que pueden comerlas sea el tamaño de la población mundial. De igual manera sucede en el trading, el desespero por ganancias, la codicia, las proyecciones poco realistas y la confianza que genera dominar una técnica pueden hacernos perder las proporciones. 

Una cosa es que haya un potencial gigantesco de movimientos semana a semana y otra lo que cada quien pueda generar acorde a sus condiciones de trabajo, objetivos, capital, dedicación, escalas de trabajo, manejo de riesgos, entre otros. El Doctor Brett Steenbarger lo define brillantemente en su libro The Daily Trading Coach: El trader que trabaja sus metas sobre el potencial de mercado entra en situaciones de presión y estrés extremas que lo llevan a las prácticas de sobre análisis, sobre operación y manejo de riesgos descontrolado, todo lo cual finalmente erosiona su capital, su confianza y el resultado final son pérdidas catastróficas. Entonces olvidemos el gran potencial de pips como la meta final, más bien entendamos que este potencial está allí para ser explotado de manera racional, rentable y sistemática. ¿Cómo? Simple, el mismo Dr Steenbarger señala un camino: Haga metas logrables, que no le generen estrés, cúmplalas y en la medida que se logren en el tiempo haga un avance paulatino en tamaño de operación. Este es el triunfo de la razón sobre la codicia, en una actividad donde traders sin entrenamiento y aun entrenados optan por la segunda. Hace más un trader que logra 100 pips semanales de utilidad (ganancias – pérdidas) para ir subiendo su volumen de operación con pies de plomo y riesgos controlados. Los demás son jugadores, apelan al valor y el trading no es parta valientes, es para personas con disciplina.