La huella del dinero: Adquiera la habilidad de ir junto a las “manos fuertes“

Este artículo ha sido escrito por Borja Muñoz Cuesta, trader

Para operar en los mercados y hacer trading, empleo el volumen en mi toma de decisiones. Como sabrá, las “manos fuertes” o “dinero profesional”, es decir, los grandes inversores, bancos, fondos de inversión e instituciones, luchan permanentemente entre ellos, conscientes de que sólo una posición con más dinero en contra les puede afectar, por lo a lo largo de las décadas han aprendido a ganar, perder, posicionarse y sobre todo, testear permanentemente zonas para ir ganando terreno en sus batallas contra todos. También contra usted, sí, lo lamento. 

Cómo funciona

Las “manos fuertes” pocas veces llaman la atención de otros inversores, para ello evitan ejecutar todas sus órdenes en un solo punto del gráfico, lo hacen poco a poco, pero dejando huellas y patrones sobre sus manifiestas intenciones: ¡Ganar! como lo vienen haciendo desde hace más de un siglo. La lucha constante entre manos fuertes genera movimientos y estrategias. Es una competición despiadada y fascinante si se sabe interpretar y aprovechar. 

Los mercados se asemejan a un campo de batalla, luchas entre la oferta y la demanda donde cada uno tiene armas e intensidades diferentes, y donde solo caben tres tipos de alternativas: ir en tendencia alcista, ir en tendencia bajista o no generar ningún tipo de movimiento y estar en lateral, lo que nos posibilita saber cuándo operar, y al mismo tiempo, reconocer cuándo es momento de no hacer nada y evitar tomar riesgos innecesarios. Todo esto por una simple razón, mi dinero no mueve el mercado, soy un soldado más en el campo de batalla que sigue las órdenes de un general, en este caso los grandes institucionales. No genero los impulsos en los mercados ni los movimientos, simplemente procuro aprovecharme del dinero de otros y de los impulsos que han creado los grandes inversores y manos fuertes.

Por todo ello, le confirmo que el volumen es una estrategia que no caduca en el tiempo, permitiéndonos reaccionar en vez de adivinar. El volumen es parte integrante del mercado. Gracias a él podemos saber con qué nivel de intensidad se está luchando y entender dónde se ha posicionando el gran capital. Ni usted ni yo tenemos la capacidad de influir en la columna del volumen, pero las órdenes en bloques de las manos fuertes no se pueden ocultar.

Por lo tanto, el trading plan es sencillo: Aplicar el estudio del volumen y su influencia en la acción del precio a lo que sucede en cada instante del mercado y planear los escenarios de mayor probabilidad. Desechar la opción menos probable, la que está perdiendo la batalla, y fijarse sólo en cómo posicionarse con quién gana. No elucubrar posibles giros o cambio de tendencia, mucho menos dirimir una batalla en la que saldrá mal parado, simplemente queremos recoger la insignia junto al lado vencedor. No querer ser el más listo del bar, sino poder pagar la ronda. Estaremos al lado de quienes siempre ganan por una simple razón; pierden muy poco y acumulan grandes recorridos de ganancias. En el trading mejor no ser del “Mirandés”, acuda a las pantallas con la bufanda del Real Madrid o el Barça. Cuanto antes asuma esta realidad, antes dejará de batallar contra el mercado y pasará a ser su aliado. No tiene que quitarle el dinero a las manos fuertes, jamás podrá. A su bolsillo llegará el dinero de las personas que con soberbia y altanería acuden a los mercados, sintiéndose preparados, listos para ganar a un regimiento de matemáticos Cum Laude y algoritmos cuánticos. También a usted, que con modestia estudia el mercado y no pretender ser el más listo sino, al menos, el menos tonto. ¡Perfecto! Los queremos siempre, los necesitamos. La industria y su efectivo marketing no dejará de generarlos. Son el combustible que mantiene todo en marcha y funcionando.

Dejando la huella gracias al volumen

¿Cómo sabemos que las grandes instituciones o manos fuertes dejan una huella de sus posiciones en el mercado? Gracias al volumen. Cada vez que un trader compra, alguien debe vender y viceversa. Todas estas operaciones quedan reflejadas en el volumen, por lo que cada transacción de compra que se ejecuta, casándose con una venta, origina un aumento del volumen de contratación. El volumen refleja la cantidad de órdenes ejecutadas y casadas por lo que analizar el gráfico sin el dato del volumen es como comprar un coche sin depósito de gasolina. El volumen es el suministrador de energía del mercado. Si empezamos a entenderlo, empezaremos a operar a partir de hechos, y no a partir de noticias. El volumen es dinero, y el dinero mueve el mercado. Si aprendemos a ver e interpretar cómo se posiciona ese dinero, sabremos aprovecharnos de los futuros movimientos. 

Centrándonos en aspectos más prácticos y operativos, cuando observamos un volumen alto en nuestro gráfico, tendremos la certeza de que las manos fuertes han decidido hacer algo, posicionarse, prepararse para que el movimiento les proporcione dinero. Ningún movimiento en los mercados es causado por la aleatoriedad de las posiciones de los pequeños inversores, sino que es la causa de las fases de distribución y acumulación de las manos fuertes. Si cree que el mercado es un entorno que se mueve de manera aleatoria, ¡despierte! todavía está a tiempo de entender cómo funciona este juego del dinero. El volumen nos demuestra cuándo y cómo se están moviendo los actores principales. También se suele decir que el volumen es relativo respeto a las velas anteriores, pero mi experiencia demuestra que es posible averiguar niveles de volumen relevantes por cada marco temporal que estemos operando y para cada activo que elijamos. Cuando superan esa cifra, se evidencia que el movimiento tiene estrategia, una intencion, es parte de un plan de maniobra, de una manipulación. Adoro los mercados manipulados por las grandes instituciones, ellos siempre tienen un plan, la balanza siempre está a su favor, y líbreme Dios de estar en su contra, siempre y cuando sepa ganar junto a ellos, porque ellos lo harán tanto si consigo la destreza como si no.

La lucha entre la oferta y la demanda

Todo precio de cualquier mercado se mueve en base a la lucha continua entre la oferta y la demanda. Si tenemos más presión de la oferta, el precio bajará, si tenemos mayor presión de la demanda, el precio subirá. El desequilibrio de fuerzas hace que el precio se mueva hacia el lado que más presiona, alejándose del lado que menos lo hace. Es una transferencia de propiedad entre manos débiles y manos fuertes, porque cuando presionan las ventas, las manos fuertes aprovecharán para comprar todo lo posible y a precios mejores. Por contra, cuando presionan las compras, las manos fuertes venden todos los contratos posibles. 

Un apunte interesante sobre las tendencias y el volumen es que el trader novel piensa que se necesita volúmenes muy altos para hacer mover y avanzar una tendencia, pero si algo va en la dirección correcta, no se necesita producir un esfuerzo para mantenerla en esa dirección. Un coche que va a 120 km/h en una autopista, necesita el mínimo toque de acelerador para mantener dicha velocidad. Los esfuerzos se producen cuando se necesita detener o cambiar de dirección. Cuando estos aparecen generan una zona importante, lugar al que debemos prestar suma atención, observando al resultado de dicho esfuerzo. Por lo tanto, cuando vea mucho volumen en el gráfico, pregúntese siempre ¿qué está pasando con todo este esfuerzo?, ¿qué resultado generará?

Las manos fuertes, dentro de su estrategia de posicionamiento, tendrán que producir un esfuerzo para hacer que el precio se pare y se gire, o para hacer que el precio rompa un nivel determinado y siga con su movimiento. Recuerde que el volumen es dinero y que si el esfuerzo se mide en volumen alto en zonas importantes, entonces cada esfuerzo producido es dinero inyectado al mercado para conseguir un resultado. 

Primer ejemplo de contexto y aplicación 

El volumen relevante hace referencia al nivel de transacciones en un marco de tiempo que supera el promedio del activo financiero en determinado periodo de tiempo. Por ejemplo, en el futuro del DAX en marcos de 1 minuto nos muestra un promedio de 500 contratos, lo que esté por encima de esta valor ya sería un volumen relevante, produciéndose dentro de un movimiento de impulso, un movimiento que quiera consolidar alguna tendencia. 

En el caso del gráfico 1, primero aparece el volumen relevante, la oferta está empujando con ganas poniendo dinero en su intento. Lo cual nos alerta, estando atentos a la confirmación de la zona por parte de la otra fuerza, si tiene intención de lucha o si va a dejar continuar la tendencia. A continuación, regresan a la zona donde se presentó el volumen relevante, toca la media media móvil de 15 y en el círculo verde se proyecta una precisa entrada en corto. Adicionalmente hay un “secado” de volumen que confirma la falta de fuerza o interés de la demanda, lo que ocasiona que el precio continúe su caída.

Si una fuerza, en este caso la oferta, empuja con intención y la otra fuerza (demanda) saca bandera blanca y abandona la lucha, lo más probable es que el precio siga en la dirección de quien puso más dinero, es decir, los cortos serán menos probables.

El stop loss se encuentra detrás de la zona, a unos 15 puntos de distancia. El stop nos protege ante la posibilidad de que el movimiento más probable no se produzca. Lo colocamos detrás de una zona de volumen para que la fuerza contraria tenga que producir un esfuerzo para alcanzarlo. Entre 70 y 80 veces de cada 100 no se produce ese esfuerzo. Procuramos que el objetivo de ganancia se reparta entre dos contratos, buscando 8 puntos con el primero de ellos y con el restante un recorrido más profundo que continúe la tendencia, pero ya bajo la tranquilidad de haber protegido el beneficio bajo un stop deslizante. Buscamos acumular la mayor cantidad de puntos, respetando siempre los retrocesos del mercado y dejando el stop detrás de las zonas donde se presentan los volúmenes relevantes que confirman los nuevos impulsos. Deja correr las ganancias y cortar rápido las pérdidas, mantra de cualquier gurú de las finanzas que se precie. El problema es que casi nunca se sabe dónde y cuándo cortar las pérdidas y cómo dejar correr el beneficio. Ahora lo sabe y lo puede poner en práctica. 

Segundo ejemplo bajo distinto contexto

Todos los volúmenes relevantes tienen ventaja estadística, los hemos estudiado, medido, comprobado. Pero no todos los traders somos iguales y en ese punto el método empieza a tener variaciones, por ejemplo en la imagen 2, se cumple el volumen relevante. En el punto de precio (1) con volumen en A se ve un claro impulso de la demanda, el mercado nos muestra que las manos fuertes están presentes y es importante estar atentos. Posteriormente en el punto (2) con el volumen en B nos confirman que van a testear en zona, la misma donde se presentaron en el punto (1). Lo hacen una y otra y otra vez. Es la naturaleza misma de los movimientos. Una vez que empiezas a ver esto, no paras de verlo a cada instante. Luego se presenta una divergencia de volumen en C, en la zona donde antes generaron una gran cantidad de compras y donde lo más probable es que reboten. En el caso de que no se proyecte el movimiento, el stop debe de estar posicionado en la línea negra que se marca en el gráfico, dado que es donde se presentó el primer volumen, el más relevante y mostraron la primera intención que tenían (1).

Las manos fuertes limitan las pérdidas constantemente, marcan las posibles pérdidas en los puntos donde generaron el volumen de su primer impulso, porque es dinero que no están dispuestos a perder, pero en caso de hacerlo por factores más fuertes que ellos, aceptan unos máximos, hasta el punto donde entraron por primera vez. En el ejemplo del gráfico 2, la entrada debe ejecutarse en el punto 3 o 4 dependiendo del perfil del trader, el stop debajo de la zona en la línea negra. En el punto 4, se debe observar el volumen en “C”, cotejar como la oferta no lucha, no opone resistencia, desaparece y se deja vencer. ¿Qué podemos esperar? Lo más probable, que siga el movimiento alcista, que cumplan los planes de la demanda. El stop siempre es técnico. Siempre se encuentra detrás de una zona de mucho volumen, o en una zona donde a la fuerza contraria le suponga demasiado esfuerzo alcanzarlo. Porque tener un método con el 70 o el 80% de aciertos, te muestra que en muchas ocasiones el precio seguirá moviéndose en la tendencia previa, pero debemos saber dónde posicionar el stop para las 20 o 30 veces que no se cumpla y aprender a aceptarlo. Es parte inequívoca del negocio. Y nos mantiene en juego para seguir ganando. El stop loss es su amigo, su socio en este negocio. Le ayuda a limitar las pérdidas que, seguramente, serían mayores de hacerlo sin protección. Una de las enormes ventajas de esta operativa, es que siempre conocerá el tamaño de su stop, mucho antes de ejecutar su orden de entrada, lo que permite dilucidar si el movimiento y la oportunidad se ajusta a nuestra gestión del riesgo. Recuerde que como trader, la última decisión siempre será suya, y siempre podrá elegir no entrar en una operación demasiado agresiva o con excesivo riesgo.

En el segundo ejemplo se emplea un stop más amplio que en el primer caso. Son dos entradas con ventaja estadística y volumen relevante, pero de acuerdo al perfil del trader y el riesgo dispuesto a asumir, se deben ejecutar o no las entradas. 

Conclusión

Recuerde que con un método sencillo, reglas directas y mucho entrenamiento, podrá alcanzar la habilidad para ganar en los mercados financieros. Aunque los conocimientos por sí solos no garantizan el éxito, necesitará carácter para superar los errores, algo natural e ineludible que debe aceptar. Perder el miedo a fallar, practicar y tratar de establecer tus propios limites. Simple y a la vez complejo. El trading no es lo que piensa, es lo que hace.

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