El Dólar australiano se recupera ante la disminución de las tensiones comerciales; el foco se centra en las actas del RBA

• El Dólar australiano se estabiliza tras la fuerte caída de la semana pasada, recuperándose modestamente por encima de 0.6500.
• El Secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, insinúa que los aranceles "no tienen que aplicarse" si China toma medidas para aliviar las tensiones.
• Las actas de la reunión del RBA que se publicarán el martes pueden ofrecer nuevas pistas sobre la política monetaria tras mantener las tasas en el 3.60% en septiembre.

El Dólar Australiano (AUD) se estabiliza frente al Dólar estadounidense (USD) el lunes, con el par AUD/USD subiendo de nuevo por encima de 0.6500 después de caer a su nivel más bajo desde el 27 de agosto, alrededor de 0.6472, el viernes. La recuperación se produce a medida que el sentimiento de riesgo mejora ligeramente tras un cambio en la retórica de Washington durante el fin de semana que alivió las preocupaciones sobre una nueva escalada en las tensiones comerciales entre EE.UU. y China.

Al momento de escribir, el AUD/USD se negocia lateralmente cerca de 0.6516, con un aumento de casi 0.65% en el día, ya que los estrechos lazos comerciales de Australia con China hacen que el par sea altamente sensible a los desarrollos en las relaciones entre EE.UU. y China. La retórica más suave de Washington proporciona alivio al AUD, ayudándolo a estabilizarse y recuperarse de la venta masiva de la semana pasada, a pesar de un Dólar más fuerte.

A última hora del viernes, el presidente de EE.UU., Donald Trump, reavivó las tensiones comerciales con China, anunciando planes para imponer aranceles del 100% a todas las importaciones chinas a partir del 1 de noviembre, tras informes de que Pekín planeaba restringir las exportaciones de elementos de tierras raras. El anuncio sacudió los mercados globales y envió los activos de riesgo a la baja. Sin embargo, durante el fin de semana, Trump adoptó un tono más suave, publicando en Truth Social que "¡No se preocupen por China, todo estará bien!" y que Estados Unidos busca "ayudar a China, no perjudicarlo."

Más temprano el lunes, el Secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, dijo que el aumento propuesto del 100% en los aranceles "no tiene que suceder" si Pekín toma medidas para aliviar las tensiones, señalando que las conversaciones a nivel de trabajo entre funcionarios de EE.UU. y China están en marcha esta semana. Las esperanzas de negociaciones renovadas ayudaron a calmar los mercados tras la turbulencia de la semana pasada. Sin embargo, el sentimiento sigue siendo frágil, ya que los inversores permanecen cautelosos ante el enfoque impredecible del presidente Trump sobre la política comercial y su frecuente uso de amenazas arancelarias como táctica de negociación.

De cara al futuro, los operadores centrarán su atención en las actas de la reunión del Banco de la Reserva de Australia (RBA) que se publicarán el martes para obtener nuevas orientaciones sobre la política monetaria. El banco central mantuvo su tasa de interés en 3,60% en septiembre, señalando que la disminución de la inflación subyacente se ha ralentizado y que mantener la actual orientación de la política permite más tiempo para evaluar cómo los recortes de tasas anteriores están influyendo en la demanda y la presión sobre los precios.

En Estados Unidos (EE.UU.), la atención sigue centrada en el cierre gubernamental en curso, sin señales de un avance en el Congreso mientras el estancamiento de financiamiento se extiende a su día 13. Con un calendario económico ligero, el foco se dirige a los comentarios del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, el martes. El informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC), inicialmente programado para el miércoles, ha sido pospuesto para el 24 de octubre debido al cierre, mientras que varios otros funcionarios de la Fed están programados para hablar a lo largo de la semana.