Educación

El arte de invertir en Bolsa de Valores

En más de veinte años de convivencia con la bolsa de valores como operador, trader, consultor y capacitador, he podido conocer a inversionistas de todo tipo en diferentes circunstancias del mercado. Con el comportamiento que muestran cuando la bolsa está eufórica, apática o en pánico concluyo en que el factor psicológico o emotivo es decisivo para tener éxito en este tipo de inversiones.

Quien adolece de suficiente control de sus emociones y se deja llevar por lo que opina o hace el resto está condenado al fracaso. Miles de veces hay que comprar las acciones cuando todos venden, y vender cuando todos compran. ¿Por qué? Porque cuando la bolsa de valores entra en dirección alcista y sube continuamente con porcentajes elevados alrededor del 4% diario –cuando entra en euforia- genera noticia entre los diferentes medios de comunicación. Los ciudadanos se enteran de esto, se entusiasman, y deciden invertir sus ahorros, dinero prestado del banco o de otra fuente, provocando más demanda en el mercado bursátil, y por tanto, mayor repunte en los precios de las acciones. El problema está en que estos inversionistas novatos -muy emocionados- sumados a los más antiguos, pero cegados por la euforia, creen que el cielo es el límite y las acciones subirán indefinidamente. Mientras tanto, los inversionistas sabios y ecuánimes, guiados por el gélido razonamiento empiezan a salir del mercado ordenando ventas a precios atractivos.

Similar figura se repite, pero a la inversa, cuando la bolsa de valores entra en dirección bajista. En este escenario, cada día los precios de las acciones caen más, todo se hunde, los medios de comunicación publican el desplome bursátil, y los inversionistas se ahuyentan vendiéndolo todo a cualquier precio. El momento extremo es el pánico generalizado. Luego, la bolsa suele entrar en una etapa de tensa calma. Los medios de comunicación empiezan a olvidarla. Nadie habla de acciones. Pero coyunturas de crisis como ésta, son las grandes oportunidades que el mercado nos brinda para entrar en él adquiriendo gangas. Debemos considerar que el comportamiento de la bolsa siempre es cíclico. He ahí una de las claves del negocio.

Pero en las épocas difíciles como de bonanza, lo primordial es manejar las emociones para no caer ni en triunfalismos ni derrotismos, pues ambas son las mejores actitudes para conducirnos hacia el fracaso seguro. El buen inversor siempre tiene los pies sobre la tierra cuando gana, y corrige sus errores cuando se equivoca. Permanentemente busca perfeccionar su sistema de trading. Pero sobre todo es un apasionado en lo que hace. En este negocio no existe el inversionista exitoso carente de pasión. La satisfacción del trader no solo pasa por ganar dinero, sino por saber que lo que hace, lo hace bien.

Todo esto me conduce a desterrar cinco mitos que son los siguientes:

Mito N° 1: La bolsa de valores está destinada a personas altamente calificadas en finanzas

Puedo asegurar que invertir en la bolsa de valores o mercados financieros, en general, más que una ciencia es un arte. Y lo corroboro cuando noto que más del 80% de inversionistas que he conocido no son personas especializadas en altas finanzas o economía. Por el contrario, son sociólogos, contadores, docentes, periodistas, administradores e incluso personas que no han seguido estudios superiores, pero que como buenos emprendedores buscan oportunidades de negocio.

Mito Nº 2: Invertir en bolsa está destinado a gente acaudalada

Que muchas personas adineradas participen en ella, no significa que solo éstas tengan el privilegio de invertir en acciones. No existe ninguna norma que estipule un mínimo de capital para destinarlo a la bolsa, y podemos hacerlo desde mil dólares o su equivalente en nuevos soles como sugerencia.

Mito Nº 3: Invertir en bolsa es demasiado peligroso

Cuando no tenemos un plan para nada, todo es peligroso. Si nos lanzamos a la piscina sin antes haber aprendido a nadar, lo lógico será que nos ahoguemos. Si nos atrevemos a manejar un automóvil si antes haber pasado por una capacitación, obviamente nos estrellaremos. Y si nos aventuramos a invertir en bolsa sin tener un plan, un método, una estrategia, definitivamente nos irá mal. La bolsa como cualquier negocio tiene sus riesgos, pero podemos manejarlo minimizándolos para tener éxito.

Mito Nº 4: Invertir en bolsa implica estar pegado a la pantalla permanentemente

A menos que nuestro sistema de trading sea trabajar en cortísimos plazos, la mejor manera de invertir es teniendo horizontes de mediano plazo. Si a esto sumamos la tecnología de las plataformas virtuales que muchos brókers nos brindan, podemos programar los precios de compra y venta de tal manera que aunque tengamos la computadora apagada, las operaciones igual se ejecutan. Recordemos que con todos sus ingredientes –entre ellos la adrenalina- la labor del inversionista es placentera, no esclavizadora ni estresante.

Mito Nº 5: El dinero para invertir en bolsa lo puedo obtener de un préstamo bancario

Si vamos a empezar a invertir en bolsa, no es aconsejable endeudarnos buscando el capital ajeno para hacerlo. Y mucho menos aventurarnos a invertir en acciones sin mayores fundamentos. Ésa sí, podría ser la forma más fácil y directa de empezar en bolsa y morir fulminantemente. Recordemos que el dinero destinado a la bolsa debe ser nuestro excedente destinado al ahorro. Invertir pensando en que a fin de mes debemos pagar la cuota incluido los intereses, nos obligaría a trabajar presionados buscando oportunidades muchas veces donde no las hay y condicionándonos a ser proclives al error.

El éxito en la bolsa de valores depende muchas veces más que de nuestra inteligencia, de los rasgos de nuestro carácter. Debemos ser pacientes para aplicar nuestros conocimientos teóricos en la práctica. Solo las experiencias acumuladas en el tiempo nos permitirán establecer nuestros propios principios de trabajo, pues la bolsa no es solo una escuela donde aprendemos a invertir, sino una escuela de humanidad donde aprendemos a vivir.

La información de estas páginas contiene declaraciones prospectivas que implican riesgos e incertidumbres. Los mercados e instrumentos descritos en esta página tienen únicamente fines informativos y de ninguna manera deben considerarse una recomendación para comprar o vender estos activos. Debe hacer su propia investigación exhaustiva antes de tomar cualquier decisión de inversión. FXStreet no garantiza de ninguna manera que esta información esté libre de errores, errores o incorrecciones materiales. Tampoco garantiza que esta información sea de carácter oportuno. Invertir en Mercados Abiertos implica una gran cantidad de riesgo, incluida la pérdida de la totalidad o una parte de su inversión, así como angustia emocional. Todos los riesgos, pérdidas y costos asociados con la inversión, incluida la pérdida total del principal, son su responsabilidad. Los puntos de vista y las opiniones expresadas en este artículo pertenecen a los autores y no reflejan necesariamente la política oficial o la posición de FXStreet ni de sus anunciantes.


Contenido relacionado

Cargando



Copyright © 2024 FOREXSTREET S.L., Todos los derechos reservados.